lunes, 14 de marzo de 2016

Catarsis.

Que no te engañen porque todos, en algún momento, necesitamos ser débiles. Que alguien nos acune y nos de cobijo un viernes por la noche o cualquier día de la semana cuando sentimos que el mundo se nos está cayendo encima, mientras nos susurra esa frase compuesta de cinco palabras esperanzadoras "todo va a salir bien".  Hay que aceptar que, a veces en la vida somos cuchillo, desgarramos carne o viejas heridas, mientras que, en otras ocasiones, simplemente somo eso, carne desgarrada, condolida y agotada. Todo eso que nos han inculcado de las balanzas,  se nos aplica a nosotros también porque no somos una formula completa.
Es completamente normal sentirnos débiles y agotados. Derramar lágrimas al otro lado de la puerta para después cruzarla con una sonrisa, que dice ," por favor que alguien me ayude", colocar las cosas al lado del asiento del bus porque te apetece estar solo, querer buscarle en cualquier sitio y volver a arrastrarte porque sin ese amor no eras nada , o entregarte a la fría oscuridad de la noche cargada de recuerdos. Somos pequeños átomos que forman esta galaxia, y qué son un par de gotas de agua salada comparada con la inmensidad de un océano. Nada. 
Que no te engañen, que no te hagan elegir entre débil o fuerte, porque no hay elección entre ambas. A veces para ser débil y desnudarte sin necesidad de quitarte la ropa ante alguien, hay que ser demasiado valiente. 
Así que, por favor, no te engañes. 

4 comentarios:

  1. Impresionante. Te lo juro. A medida que iba leyendo todas tus entradas, todos tus pensamientos; la boca se me iba abriendo más y más con cada palabra.
    Me encanta. Sigue así. Vuelve a dejarnis boquiabiertos con otra entrada, por favor.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad es que pensaba que nunca iba a recibir comentarios como este , porque el blog, por más que me duela, lo tengo como pasatiempo o incluso como diario, pero te agradezco este comentario.
      Un beso enorme.

      Eliminar